domingo, 5 de agosto de 2018

Su árbol



Su árbol fui, y aún lo soy,
me viste de susurros,
me nutre con amor,
se acobija a mi sombra,
y en mi silencio le dejo estar,
yo soy su calma, soy su paz,
¡Ven y haz tu nido! le dije con ternura,
bajo mis hojas no hay dudas,
no hay noche oscura,
te podrás acurrucar entre mis ramas,
escucharás el latir de mi alma,
y en mi tronco escalarás tus ganas.

Yo soy su árbol y en mí está su nido,
él vuela, y vuelve a buscar mi abrigo.
Soy su morada, de amor y consuelo,
no tengo reproches, ni tengo peros,
y es que nuestros silencios, son nuestros,
y vivimos despiertos nuestro sueño. 

Por: Lili (L.A.L)



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