Y se escondió entre cayenas y azucenas,
se vistió de suspiros y de estrellas,
se subió a lo alto de una palmera,
y logró divisar a aquél por quien tenía una pena,
se escondió apresurada entre la multitud,
aunque en su corazón sintiera total gratitud,
se escondió en un te espero y en una promesa no dicha,
aunque muchas verdades quedaron sobredichas,
y a él; el corazón le decía:
"Es ella a quien yo quería..."
Y en el olor de las flores como dulce complicidad,
no se dio cuenta que el amor fue más que una amistad,
le paso por el lado y alguna vez sonrió,
hoy sólo le queda el recuerdo en su corazón.
Por: Lili (L.A.L)
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